9 ventajas del césped artificial frente al natural
El césped artificial está ganando terreno en los jardines, centros deportivos y hoteles de todo el mundo, gracias a sus numerosas ventajas frente al césped natural. Sus ventajas más evidentes lo convierten en una solución flexible y asequible para disfrutar de un césped siempre verde. Pero, ¿sabías que también garantiza la paz y la tranquilidad en tu hogar? Descubre nueve ventajas de elegir un césped artificial frente al césped natural.
Cómo el césped artificial crea un hogar más pacífico
Tu casa, ese lugar feliz donde toda la familia se reúne para relajarse y disfrutar de la compañía de los demás… hasta que el mantenimiento del jardín lo estropea todo, generando ansiedad, peleas y un descontento general en la familia.
Si buscas más paz y tranquilidad en tu espacio exterior, el césped artificial puede ser la solución. Hemos enumerado nueve ventajas de las que se beneficiará toda la familia. Descubre por qué el césped artificial es más práctico que el césped natural.
1. Imita a la naturaleza donde quieras
¿Quieres instalar un pequeño jardín urbano? ¡Convierte tu decepción en motivación! Utiliza el césped artificial para recrear el aspecto y el tacto natural de un césped, incluso si tu espacio exterior se limita a una terraza o un balcón. Sin duda, el césped natural no ofrece esta ventaja.
El césped artificial ilumina cualquier espacio exterior o interior, y nadie podrá notar la diferencia con el césped auténtico. Gracias a la nueva tecnología de fabricación y a un innovador diseño, el césped artificial se ha vuelto mucho más atractivo con el tiempo: ya no parece falso, y está disponible en una amplia variedad de colores y alturas y las posibilidades de aplicación son infinitas.
2. Se mantiene de un verde impecable durante todo el año
En realidad, sí notarás la diferencia, pero solo porque se mantendrá en perfectas condiciones durante muchos años. Mientras que el césped natural se marchita en invierno o se quema en verano, el césped artificial se mantiene impecable en todas las estaciones.
Gracias a sus estabilizadores especiales de UV, conserva su exuberante color verde incluso después del más soleado de los veranos. Y a diferencia del césped natural, el césped artificial también prospera en las zonas de sombra de tu jardín. Y podrás olvidarte de las zonas desnudas en tu césped. Menudo alivio, ¿verdad?
3. Ofrece tiempo de calidad
¿Tu familia mantiene un estricto calendario para las tareas de mantenimiento del jardín? ¿O os peleáis constantemente por ver a quién le toca quitar las malas hierbas y cortar el césped? Tener un césped natural perfecto puede ser un auténtico dolor de cabeza.
Apostar por un jardín de bajo mantenimiento con césped artificial te ayudará a enterrar el hacha y pasar más tiempo de calidad con tus seres queridos. Olvídate de poner a prueba tus conocimientos de jardinería (y tu paciencia) o intentar utilizar máquinas costosas. Simplemente siéntate y relájate.
4. Es ecológico
Un césped artificialmente elimina inmediatamente la necesidad de utilizar un cortacésped contaminante, fertilizantes químicos o demasiada agua para su mantenimiento. Y el césped artificial Turfgrass presenta otras ventajas ecológicas: es 100 % no tóxico y libre de plomo.
Podrás disfrutar de tu increíble césped sin sentirte culpable por su impacto negativo en el medio ambiente.
5. Los niños pueden jugar con total seguridad
No te preocupes por si los niños se hacen daño en el césped artificial. Es casi tan suave como el culito de un bebé. Podrán jugar en él, revolcarse o disfrutar de una siesta, sin que se les irrite su sensible piel.
Y, si se caen, la densidad y la esponjosidad del césped artificial les protegerán. Se volverán a levantar sin ningún rasguño.
6. No es alérgeno
Si tienes alguna alergia, como la fiebre del heno, sabrás que el goteo nasal y los ojos llorosos suelen acompañarse de cambios de ánimo y mal humor.
El césped artificial no es alérgeno. Mantiene el polen alejado y da un respiro a los miembros de tu familia (y a tu salud). Disfruta al máximo de las calurosas noches de verano en tu jardín, sin estornudar.
7. Se acabaron las patas sucias y las marcas de huellas
La lluvia y la nieve pueden convertir rápidamente el césped natural en un campo pantanoso y embarrado, y tu sala en un completo desastre. En vez de perseguir a tus hijos y mascotas con una fregona cada vez que entren en casa, hazte la vida más fácil eligiendo césped artificial.
El sistema de drenaje permite que tu césped soporte cualquier condición climática: sin charcos, sin barro e incluso se secará más rápido que el césped natural.
8. Te permite ahorrar dinero
Al contrario de la creencia popular, un césped artificial no es muy caro. De hecho, incluso puede ayudarte a ahorrar dinero a largo plazo.
El césped artificial solo requiere una inversión única, mientras que el césped natural implica muchos costes de mantenimiento recurrentes: fertilizantes, agua, herramientas de jardinería, y mucho más. ¡Y cada céntimo extra cuenta!
9. Es fácil de instalar
A diferencia del césped natural, puedes instalar el césped artificial en cualquier tipo de superficie: hormigón, baldosas, cemento y, por supuesto, tierra. ¿Te gustaría encargarte tú mismo de la instalación? En ese caso, asegúrate de evitar estos diez errores de instalación frecuentes.
Y si no eres muy manitas o prefieres garantizar un resultado perfecto, con nuestros instaladores certificados podrás estar tranquilo y lo instalarán por ti. Siempre hay cerca un experto de Turfgrass local que estará encantado de ayudarte en cada paso del camino.